Teoría de Prevención situacional y Teoría de Ventanas Rotas

 

Ilustración de Grafitis en las paredes, fotografía tomada por Martínez, F. Fuente: Unsplash

Teoría de Prevención situacional

“La prevención situacional del delito busca reducir las oportunidades para categorías específicas de crimen, aumentando los riesgos y dificultades asociados y reduciendo las recompensas.” (Clarke, 1997, p. 4) [traducción propia] 

Esta teoría defiende que, para evitar que ocurra un delito, se debe aplicar alguna de estas acciones:

• Aumentar el esfuerzo del victimario.
• Incrementar el riesgo de ser atrapado.
• Disminuir o eliminar las recompensas esperadas por el victimario.
• Evitar o disminuir provocaciones.
• Eliminar las excusas.

Esta teoría y sus acciones cuentan con la limitante de que, no abordan las causas estructurales y sociales del delito, por lo que, se trata de soluciones a corto plazo, más no a largo plazo.

Ejemplos de estas acciones sería los siguientes: 

• Colocar cámaras de seguridad.
• Colocar alarmas.
• Contratar servicio de seguridad privada.
• Eliminar el uso de efectivo.
• No dejar artículos de valor dentro del vehículo.
• No descuidar los objetos personales.
• Colocar letreros de advertencia.
• Organizar seguridad comunitaria.
• Mejorar la iluminación en las calles.
• Recuperar espacios públicos.

 Teoría de Ventanas Rotas

Esta teoría sostiene que, la tolerancia hacia el deterioro, el desorden y el desaseo, genera una impresión de desidia, desapego y falta de interés, lo que puede derivar en actos cada vez más serios.  

Al no haber un adecuado control sobre delitos menores o contravenciones, como consumo de alcohol y drogas en la vía pública, contaminación, deterioro de espacios públicos, daños a la propiedad, entre otros, se genera un sentimiento de impunidad, que podría ir escalando hacia delitos más graves. 

Según esta teoría, sí un daño no es reparado, dará pie a que el deterioro continúe, los daños se hagan mayores y aumente la tolerancia de las personas hacia este tipo de acciones y se normalice.

Desde el punto de vista del análisis delictual, es posible identificar estos espacios georeferencialmente, para fomentar la mejora de las condiciones de iluminación, la recolección de desechos sólidos, la recuperación de espacios públicos, la unión vecinal para la prevención de actividades de vandalismo.

¿Son seguros los parques? Visitamos tres y no encontramos ni un solo policía

Sí se realiza un análisis de este reportaje, tomando en consideración las teorías anteriormente expuestas, sería posible concluir o determinar porque razón no se ubicó a ningún oficial de policía en los tres sitios visitados por el reportero, siendo lo más probable que los sitios cuentan con otros factores protectores, como buena iluminación, presencia de cámaras de seguridad, transeúntes alertas y vigilantes de sus pertenencias, por otro lado, los tres sitios cuentan con condiciones de aseo y ornato adecuado, no se aprecia la presencia de personas en condición de indigencia o drogadicción a simple vista, por otro lado, es importante tomar en cuenta que, lo más común es que, sí el personal policial es escaso, el mismo se mantenga o desplace por los sitios de mayor incidencia, esto según el comportamiento del fenómeno criminal de la zona y el análisis y la valoración que realice el analista criminal mediante sus recomendaciones.      

Referencias bibliográficas

Clarke, R. V. (1997). Situational crime prevention: Successful case studies (2nd ed.). Albany, NY: Harrow and Heston.

Martínez, F. (2017). Grafitis en las paredes [Fotografía]. Unsplash. https://unsplash.com/es/fotos/grafitis-en-las-paredes-ou3fG2zWbcs

Sibaja, D. (2025, junio 09). ¿Son seguros los parques? Visitamos tres y no encontramos ni un solo policía. Calle 7 Informativo. https://www.crhoy.com/nacionales/san-jose-es-el-epicentro-de-los-asaltos-en-el-pais-con-mas-de-5-mil-casos-anuales/